mis viseras aullan ciegas de sed,
la calma en la marea agota.
¡algún atisbo de escape!
la hilera de casas, calles, gente sin forma
convocan tan solo una caminata de nostalgia,
añoro la brisa y el incógnito del cielo.
el vuelo sin alas de las hojas
anuncian que aquella luz jamás volverá.
ocaso, ¿que traes hoy para mi salvación?
tu cielo camaleónico inunda, pero no rebalsa
quizás en un rincón maltrecho
en la oscuridad ciega de aquella pestilencia
encuentre la vida y tal vez la muerte
el olvido implora,
esta caminata fría implora,
esta copa de vino será la respuesta.
martes, 28 de octubre de 2008
viernes, 10 de octubre de 2008
la plaza
“la plaza”
Un día gris, los árboles
Pacíficamente se reunieron.
Todos cargaron en sus copas
Sabia fermentada.
La ciudad les cayó como un mazo,
Los sobrevivientes buscaron refugio
Entre sus pares.
“nuestra esperanza es permanecer juntos”
Inyectaron el flujo a sus raíces,
Profirieron cánticos invocando el viento,
Los bailes rituales pertenecen a Eolo.
Un grupo de muchachos se cobija en el carnaval,
Los sueños olvidados renacen
En el umbral de la danza arbórea.
El cerezo ríe a carcajadas
desparramando sus hojas sobre cigarros malacatozos
¿No es esta banca un oasis bendito?
Extraños pasadizos ignorados
Se concentran en este enjambre de troncos.
El viaje se muestra evidente
Saltemos a su infinita caída.
Un día gris, los árboles
Pacíficamente se reunieron.
Todos cargaron en sus copas
Sabia fermentada.
La ciudad les cayó como un mazo,
Los sobrevivientes buscaron refugio
Entre sus pares.
“nuestra esperanza es permanecer juntos”
Inyectaron el flujo a sus raíces,
Profirieron cánticos invocando el viento,
Los bailes rituales pertenecen a Eolo.
Un grupo de muchachos se cobija en el carnaval,
Los sueños olvidados renacen
En el umbral de la danza arbórea.
El cerezo ríe a carcajadas
desparramando sus hojas sobre cigarros malacatozos
¿No es esta banca un oasis bendito?
Extraños pasadizos ignorados
Se concentran en este enjambre de troncos.
El viaje se muestra evidente
Saltemos a su infinita caída.

martes, 7 de octubre de 2008
viernes, 3 de octubre de 2008
black out
con que violencia nos ataca el olvido
ese momento en que la busqueda acaba
y las gotas de placer chorrean constante
hacia nuestras bocas
ese momento en que el climax busca
ser infinita eternidad
la carcajada jamás es inmortal
se sumerge en dimensiones
negras, oscuras, inertes.
ahí el tiempo bendito jamás existió
la ilusión pasajera aspiró a lo imposible.
caminamos fiambres, autómatas del instinto
el goze incoloro, insípido
solo revive en el cuento de otros
la mente propia es ajena
a sus deseos y experiencias.
ese momento en que la busqueda acaba
y las gotas de placer chorrean constante
hacia nuestras bocas
ese momento en que el climax busca
ser infinita eternidad
la carcajada jamás es inmortal
se sumerge en dimensiones
negras, oscuras, inertes.
ahí el tiempo bendito jamás existió
la ilusión pasajera aspiró a lo imposible.
caminamos fiambres, autómatas del instinto
el goze incoloro, insípido
solo revive en el cuento de otros
la mente propia es ajena
a sus deseos y experiencias.
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